Es un dilema habitual. Mejoramos nuestros defectos y no tenemos ningún aspecto especialmente malo o nos dedicamos a mejorar lo que realmente se nos da bien y en eso somos muy buenos, aunque tengamos aspectos sin cubrir.
Toma una decisión ahora antes de continuar.
Ahora, piensa en personas que conozcas te parezcan brillantes ¿Lo hacen todo bien?
Qué dice la lógica
Pongamos un ejemplo. Soy una persona descoordinada y cuando tengo que llevar el ritmo por ejemplo en una clase de Aerobic me cuesta horrores. Mejoro poco y con mucho esfuerzo.
Pensemos en una virtud, algo que se me da bien (Ej. una puntuación 5-6)
Mejorar en algo que se te da bien es más fácil y disfrutas muchos al hacerlo. Pongamos que tras el esfuerzo conseguimos una puntuación (7-8). Es verdad que dejaré defectos por cuidar, que me generarán problemas pero encontraré una actividad que me encanta y se me da bien.
¿Cuál es la consecuencia de cada estrategia?
Brillantes vs Mediocres
Cada uno toma los caminos que desea pero estos tienen unas consecuencias.
- Brillantes. Los brillantes destacarán en ciertos aspectos, si encuentran su sitio disfrutarán mucho con lo que hacen y aunque les tocará limar sus defectos que les impide llevar una vida normal, no hace falta que llegue a una gran mejoría. Tendrá defectos. Para ello, tendrá que apoyarse en otras personas para cubrir todo lo necesario.
- Mediocres. Esta estrategia te hace autosuficiente pero no te emocionará. No te hará disfrutar especialmente de nada salvo que se requiera de todas las características a la vez.
¿Qué ocurre con la motivación?
Si soy muy bueno en algo y lo practico mucho estaré mucho tiempo feliz y la motivación me llevará a mejorar en lo que tenga que ver con esa actividad.
¿Qué dice la ciencia?
Una persona se siente más realizada y más satisfecha con la vida si realiza actividades que se le dan bien, más que mejorando en un aspecto que se nos da mal.
¿Qué dice mi experiencia?
Lo que más me sorprendió es que estas tenían defectos muy definidos. La realidad es que su brillantez se basaba en el uso de sus fortalezas, procurando delegar sus debilidades o montar situaciones en las que no deben aparecer.
¿Se puede vivir sin ser brillante?
¿Qué podemos aprender de esto?
Las notas de clase
Si hacemos esto iremos aprobando cursos, pero odiando estudiar. ¿Suspendemos matemáticas? No, pero habrá intentar poner el foco en lo que se me da bien, disfruto y puedo aportar más a la sociedad.