Hablamos de un excelente libro, duro en la temática y en su reflexión, muy bien medido y magníficamente escrito. Aborda un tema complejo que tiende a la simplificación en buenos y malos, pero ¿Quiénes fueron los bueno y quiénes fueron los malos?
Pediría que, antes de hacer comentarios sobre el libro, que lo leas. No es equidistante. Jon Sistiaga intenta describir una situación que conoce muy bien porque nació donde suceden los hechos imaginarios y que ha tenido que investigar para sus crónicas como periodista especializado en terrorismo de ETA y en violencia en general.
¿Cómo llegamos al libro?
Un poco por casualidad. Viendo un podcast en el que le entrevista Jordi Wild. Es una entrevista larga, de más de 2 horas (2:19:29) en la que hace un repaso a su vida como periodista. Jon ha entrevistado e investigado en situaciones muy complejas y a personas muy violentas. Dentro de ese repaso habló del libro y nos parecío muy interesante para comprender mejor la vida.
¿De qué va el libro?
El libro va sobre el fenómeno terrorista de ETA. El protagonista es una persona que hace 35 años, en su juventud, secuestró y asesinó a un empresario vasco que, para más inri, era el padre de una amiga suya. Tuvo suerte y, a pesar de ser interrogado, no fue detenido. En el momento actual, el arrepentimiento le reconcome y decide que debe asumir su culpa, pero que no era el único que lo hizo mal y otros deberían dar el paso y confesar.
Para ese motivo manda tres cartas. Una a la hija de la víctima, otra al policía que le investigó el caso y que le torturó en busca del culpable y otra su compañero de comando, abogado de prestigio y limpio como una patena. Propone, por tanto, ir al purgatorio para expirar sus pecado.
La historia tiene mucha trama e intento no contar demasiado del libro. Si bien es una novela, todos los hechos son ciertos aunque en contextos distintos.
Por qué nos gusta el libro
Es un libro bien escrito. Está escrito sencillo, claro es un gusto avanzar en sus páginas. Además, te hace pensar y te remueve. ¿Podría haber sido yo con 20 años? ¿Qué hubiera hecho en esa situación?
Al leer el libro puedes comprender los pasos que dieron muchas personas para obrar como no hubieran obrado en otra situación. Eso no exime de responsabilidad pero hay situaciones en las que es más fácil tomar una decisión que otra. Y hay unos más malos que otros.
El mal
Hay acciones que, independientemente del entorno, están mal. Puede que en el momento, dadas las circunstancias creas que son necesarias, pero por definición, está mal. Asesinar a una persona maniatada de un tiro en la nuca está mal. Lo mires como lo mires. Puede que en ese momento, fanatizado no lo veas, pero el resto de la vida tienes que vivir con ello. En el libro pone la situación del policía que torturó al etarra secuestrador y pegaba descargas eléctricas para que cantase.
La situación y el entorno
Hay situaciones en la que es más fácil dejarse arrastrar hacia esos comportamientos. Eso es indudable, al igual que no te exime de responsabilidad. Siempre pudiste negarte aunque te trajera problemas. Y la presión venía de muchos sitios, los compañeros de comando, los superiores, los políticos, las manifestaciones de apoyo. Eras el salvador de la patria. Hay daños colaterales pero eran necesarios.
En el caso del policía, nos están matando como a ratas, es una práctica normal sobre la que todos hacen la vista gorda, a mi me enseñó mi superior a torturar. Si estás ahí, pues lo haces y sino te vas.
Aunque estoy contraposicionando los hechos, no son comparables. No hay equidistancia, pero ambos están mal. Y no olvidemos hay sistemas que nos llevan sin darnos cuenta a hacer el mal, pero eso no quita que esté mal y que seas el responsable.
El arrepentimiento
Pasados los años y con otra situación nuestro comportamiento está normalizado, somos ciudadanos de bien. Pero no la conciencia. Al volver a tratar los hechos, fuera de la situación sabes que están mal, que has hecho daño a inocentes y te arrepientes. Es duro llevar la vida sin pedir perdón, sin asumir la responsabilidad. En la mayoría no se hace por verguenza, por no perderlo todo, por cobardía, en definitiva. Estos son los malos «buenos» o los malos con conciencia.
Hay otros mucho peores. Los que también lo hicieron mal, eran compañeros de los arrepentidos pero que no se arrepienten, que no sienten dolor por el daño hecho. Los que incluso se aprovechan de la situación pasada para prosperar en el presente. Estos son los malos «malos».
Es humano hacer las cosas mal y hacerle daño a otros. Incluso, convertirse en un monstruo. Son fenómenos estudiados y no tan infrecuentes. Pensemos simplemente en el acoso escolar. Lo que no es humano es la falta de arrepentimiento por el dolor provocado al otro pasado el tiempo.
¿Y quienes son los malos, malos, malos en estas situaciones?
Probablemente quienes, de manera deliberada, montan estas situaciones para que gente joven fanatizada destrocen la vida a otros y se la destrocen a si mismos. Quienes diseñan estrategias, comunicados, encolerizan y exaltan para que otros hagan. Quienes preveen los daños colaterales y no les importan. En definitiva, quienes mueven los hilos sin jugarse el tipo y mandando a los más jóvenes a jugarse la vida por ideales prestados.
En esta historia, los que tienen delitos de sangre, parece que no son los más peligrosos. Y lo son.
En definitiva, ¿cuáles son las claves?
- Hay entornos en los que es muy fácil obrar mal que en otros.
- Muchas veces estos entornos están diseñados por personas a propósito. Entornos diseñados para conseguir réditos a cambio de que personas obren mal. Estas son las peores personas, aunque no tengan otros comportamientos delictivos.
- Los hechos son irrefutables. Independientemente del entorno, están bien o están mal.
- Eso no significa que se pueda comprender que hay presiones del entorno. Al igual que el hecho está mal.
- Las personas con conciencia, fuera de ese entorno, son conscientes de que han obrado mal, muestran arrepentimiento y les pesa toda su vida. Necesitan pedir perdón, aunque no sea necesario ser perdonados.
- Las personas sin conciencia no les pesa. No les duele o les duele poco, pueden llevar una vida normal e incluso, aprovecharse de la situación pasada.
No queremos polémicas
Recomendamos un libro, que es una novela de un periodista reconocido que analiza el problema del terrorismo de ETA. Habrá mil opiniones pero esta entrada trata de hablar sobre la vida y extraer una explicación a fenómenos violentos, e intentamos explicar una parte. Si la interpretación que hacemos no crees que es adecuada, lo sentimos. A muchas personas ha marcado sus vidas para siempre y está bien aprender para el futuro.
Cómo conseguir el libro
Lorem fistrum por la gloria de mi madre esse jarl aliqua llevame al sircoo. De la pradera ullamco qué dise usteer está la cosa muy malar.
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